Justifica Jessica García la irrupción de Ramiro Arteaga en sesión del Congreso
SERGIO OCAMPO ARISTA
Chilpancingo, 9 de febrero. La diputada del PAN Jessica García Rojas justificó la irrupción del secretario general de su partido, Ramiro Arteaga Sarabia, en la sesión del Congreso del Estado del jueves pasado, argumentando que ella “había esperado más de hora y media para que iniciara la sesión, y cuando estaba el pase de lista tuve que atender a mi compañero, porque tenía que firmar unos documentos de nuestro partido”.
Fernando Donoso y Ramiro Solorio, diputados del PRD, condenaron por separado el hecho.
Entrevistada durante un receso de la Mesa Temática de Democracia, Partidos Políticos y Sistema Electoral, efectuada en la sala José Inocente Lugo del palacio de la cultura, García Rojas señaló: “fue muy sencillo, porque estábamos en el pase de lista, como presidente de la mesa de debates, y después de esperar hora y media para poder dar inicio llegó el secretario general del PAN, quien tenía que explicarme unos documentos que yo tenía que firmar”.
Dijo que se vio en la necesidad de prestarle su gafete para que pasara a una de las salas traseras. “Todavía no se iniciaba la sesión, firmé los documentos y se retiro; y bueno, es cierto que se molestaron algunos diputados que todavía se sienten sensibles (sic) y que creen que él (Ramiro Artega) es culpable, pero fueron muy pocos, no fue realmente todo el Congreso, sino dos o tres diputados que estaban molestos”.
Insistió en que era un asunto que le urgía atender con el dirigente del PAN, “fue una situación normal y no le falté al respeto al Congreso; el compañero está en un proceso, como lo está también el diputado del PRI Moisés Carvajal Millán –por un presunto saqueo a oficinas de la CNC–. Tenemos que estar un poco más tranquilos, no pasó nada”.
García Rojas insistió en que la presencia de Arteaga Sarabia nada tuvo que ver con la suplencia del finado Jorge Bajos Valverde, en la que Jacqueline Orta podría ocupar la curul. “Eso no es cierto, se dio un lapso de 40 días de duelo al Congreso para ni siquiera tocar el tema. Al PAN es al que más le interesa el esclarecimiento del crimen del compañero, la suplencia en estos momentos es lo que menos interesa; el Congreso debe preocuparse por los más de 300 asesinatos cometidos”.
Entre tanto Fernando Donoso, del PRD, expresó: “yo sigo indignado, para mí el señor (Ramiro Arteaga) está en una investigación; lo que yo tengo entendido es que está libre con las reservas de ley; una persona que esté en una investigación por una supuesta coautoría intelectual de un asesinato no puede estar en la sala de plenos.
“El llamado –añadió– es a quien le dio el gafete; es una provocación porque él (Arteaga) se ha pasado en los medios litigando, cosa que considero sumamente grave, porque se quiere politizar a pesar de que no es una situación política, sino un delito común, un asesinato, y hay que tener prudencia para que la investigación llegue al final y, si sale inocente, siga caminando con la frente en alto, y si sale culpable, pues que se vaya donde debe ir”.
Ramiro Solorio fue más cauto. “No estuve en ese momento cuando llegó al recinto legislativo Ramiro Arteaga, pero hoy leí las reacciones de mis compañeros diputados Fernando Donoso y Erika Lürsh, Creo que se debe tomar de principio el acuerdo respecto de las restricciones a la plenaria a toda persona ajena a los trabajos”.
No obstante, consideró que “son asuntos que corresponden al Poder Judicial, porque me parece que ningún ciudadano puede ser acusado o señalado en tanto no exista una resolución jurídica; hay que dejar que este asunto lo juzgue la instancia que le toca”.
El dirigente estatal del PRD, demandó “prudencia” a Arteaga Sarabia. Señaló que el panista busca “exhibirse”, pese a que aún está en calidad de indiciado y no ha aclarado su situación jurídica. “Me parece una falta de respeto”, aseguró.
Chilpancingo, 9 de febrero. La diputada del PAN Jessica García Rojas justificó la irrupción del secretario general de su partido, Ramiro Arteaga Sarabia, en la sesión del Congreso del Estado del jueves pasado, argumentando que ella “había esperado más de hora y media para que iniciara la sesión, y cuando estaba el pase de lista tuve que atender a mi compañero, porque tenía que firmar unos documentos de nuestro partido”.
Fernando Donoso y Ramiro Solorio, diputados del PRD, condenaron por separado el hecho.
Entrevistada durante un receso de la Mesa Temática de Democracia, Partidos Políticos y Sistema Electoral, efectuada en la sala José Inocente Lugo del palacio de la cultura, García Rojas señaló: “fue muy sencillo, porque estábamos en el pase de lista, como presidente de la mesa de debates, y después de esperar hora y media para poder dar inicio llegó el secretario general del PAN, quien tenía que explicarme unos documentos que yo tenía que firmar”.
Dijo que se vio en la necesidad de prestarle su gafete para que pasara a una de las salas traseras. “Todavía no se iniciaba la sesión, firmé los documentos y se retiro; y bueno, es cierto que se molestaron algunos diputados que todavía se sienten sensibles (sic) y que creen que él (Ramiro Artega) es culpable, pero fueron muy pocos, no fue realmente todo el Congreso, sino dos o tres diputados que estaban molestos”.
Insistió en que era un asunto que le urgía atender con el dirigente del PAN, “fue una situación normal y no le falté al respeto al Congreso; el compañero está en un proceso, como lo está también el diputado del PRI Moisés Carvajal Millán –por un presunto saqueo a oficinas de la CNC–. Tenemos que estar un poco más tranquilos, no pasó nada”.
García Rojas insistió en que la presencia de Arteaga Sarabia nada tuvo que ver con la suplencia del finado Jorge Bajos Valverde, en la que Jacqueline Orta podría ocupar la curul. “Eso no es cierto, se dio un lapso de 40 días de duelo al Congreso para ni siquiera tocar el tema. Al PAN es al que más le interesa el esclarecimiento del crimen del compañero, la suplencia en estos momentos es lo que menos interesa; el Congreso debe preocuparse por los más de 300 asesinatos cometidos”.
Entre tanto Fernando Donoso, del PRD, expresó: “yo sigo indignado, para mí el señor (Ramiro Arteaga) está en una investigación; lo que yo tengo entendido es que está libre con las reservas de ley; una persona que esté en una investigación por una supuesta coautoría intelectual de un asesinato no puede estar en la sala de plenos.
“El llamado –añadió– es a quien le dio el gafete; es una provocación porque él (Arteaga) se ha pasado en los medios litigando, cosa que considero sumamente grave, porque se quiere politizar a pesar de que no es una situación política, sino un delito común, un asesinato, y hay que tener prudencia para que la investigación llegue al final y, si sale inocente, siga caminando con la frente en alto, y si sale culpable, pues que se vaya donde debe ir”.
Ramiro Solorio fue más cauto. “No estuve en ese momento cuando llegó al recinto legislativo Ramiro Arteaga, pero hoy leí las reacciones de mis compañeros diputados Fernando Donoso y Erika Lürsh, Creo que se debe tomar de principio el acuerdo respecto de las restricciones a la plenaria a toda persona ajena a los trabajos”.
No obstante, consideró que “son asuntos que corresponden al Poder Judicial, porque me parece que ningún ciudadano puede ser acusado o señalado en tanto no exista una resolución jurídica; hay que dejar que este asunto lo juzgue la instancia que le toca”.
El dirigente estatal del PRD, demandó “prudencia” a Arteaga Sarabia. Señaló que el panista busca “exhibirse”, pese a que aún está en calidad de indiciado y no ha aclarado su situación jurídica. “Me parece una falta de respeto”, aseguró.
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